La adquisición de Twitter por parte de Elon Musk va a traer profundos cambios en la red social. El hombre más rico del mundo (propietario de Tesla y Space X) quiere que la aplicación del pájaro azul tenga más funciones, sea más ligera y flexible, tenga un nivel de moderación más laxo y permita la selección de varias modalidades de uso.
Tras anunciar la compra, el pasado viernes, con un escueto tuit -«el pájaro ha sido liberado»-, Musk ha ido esbozando a través de diferentes mensajes qué planes tiene para Twitter. La mayoría han sido respuestas a usuarios que le preguntaban o que le hacían peticiones y sugerencias. El autodesignado Chief Twit (tuitero en jefe, se podría traducir) tomó la decisión nada más llegar de despedir a toda la pública directiva de Twitter, Parag Agrawal, consejero delegado, y a Vijaya Gadde, la jefa de asuntos legales. Preguntado por quién era hora el CEO de la compañía, Musk ha respondido displicente que no tiene ni idea.
Tras tomar el control de la compañía, el multimillonario sudafricano ha llevado a los ingenieros de Tesla para que analicen a fondo el algoritmo de Twitter. Musk ha asegurado que ha adquirido la red social con la idea de mejorar la libertad de expresión en este foro de discusión global y «ayudar a la humanidad», pero es evidente que también quiere sacar un provecho económico.
Estos son algunos de los cambios que va poner en marcha en Twitter, y que la van a convertir en una aplicación muy distinta a lo que es ahora:
1. Tuits y vídeos más largos
Cuando nació Twitter en 2006 el límite máximo de caracteres que se podían incluir en cada mensaje era de 140. Y ni siquiera se podían añadir fotos. En 2017, se duplicó el tamaño máximo de los mensajes. Además, ahora se pueden incluir 4 fotos e incluso 4 vídeos por mensajes. Pero la gente quiere más.
Varios usuarios han pedido a Musk que permita escribir textos más largos e incorporar vídeos de mayor duración, y el nuevo tuitero en jefe ha dicho que sí, en algunas respuestas enviadas en las últimas 24 horas. Aunque aún no se conocen más detalles. También ha aceptado la posibilidad de incorporar un botón de editar el tuit, para corregir posibles erratas y errores. Una petición muy antigua por parte de muchos usuarios.
2. Una mega aplicación
Musk tiene claro que para sacar más partido a Twitter y aumentar su difusión, la aplicación tiene que tener más servicios. El emprendedor ha señalado que quiere la red social se convierta en una mega aplicación capaz de hacer muchas cosas, una aplicación «para todo».
Su modelo es la app china Wechat, que permite enviar dinero, domiciliar facturas, pedir un taxi, hacer compras… «Facilita mucho la vida diaria», apunto Musk en una entrevista concedida hace dos meses. Esta nueva súper-app podría llamarse simplemente «X» (Musk es el propietario de la web www.x.com), y ayudaría a que Twitter pasara de los 230 millones de usuarios que ahora tiene a superar los 930 millones en 2028, tal y como pretende el nuevo tuitero en jefe.
3. Moderación de contenidos más laxa
Elon Musk se ha quejado en ocasiones de que Twitter se había acartonado, que se había vuelto muy políticamente correcta, con la posibilidad de silenciar un tuit o una cuenta si un determinado número de usuarios lo reportaba como inadecuado. Ahora, el empresario quiere quitar algunos corsés para que haya una mayor libertad de expresión en la red social. Para valorar qué mensajes se vetan, se ha creado un «consejo de moderación de contenidos».
La transición no va a ser fácil. Ayer mismo, el famoso jugador de baloncesto Lebron James se quejaba de que en los últimos días se había disparado el número de cuentas que utilizaban la palabra nigger (un término racista para referirse a las personas de piel oscura en Estados Unidos). Musk le respondió que estaban ocupándose de ellos y suspendiendo muchas cuentas.
4. Una red más neutral
Varios miembros del partido republicano de Estados Unidos se han quejado de que Twitter era una plataforma que había adoptado el punto de vista más progresista del partido demócrata, especialmente en la limitación de los discursos de odio y los ataques contra minorías.
Elon Musk se ha comprometido a que a partir de ahora la red social tendrá una mayor neutralidad política. Ayer mismo, el propio directivo respondió a la ex candidata a la presidencia de EE UU, Hillary Clinton, quien se quejaba de que el autor del ataque contra el marido de la líder demócrata Nancy Pelosi era un extremista seguidor de absurdas teorías conspirativas. En su respuesta, Musk enlazó una web que da pábulo a esas teorías, dando a entender que había que aceptar otros puntos de vista.
5. Recuperación de cuentas
Una de las decisiones más esperadas es si Elon Musk cumplirá con su compromiso de restituir la cuenta del ex presidente Donald Trump, cancelada por instigar el asalto al Congreso de EE UU en enero de 2021.
Tras la toma de control de Twitter por parte del magnate, miles de usuarios que había sido suspendidas están reclamando por diferentes vías para recuperarlas. Uno de los primeros en lograrlo ha sido el rapero Kanye West (32 millones de seguidores), cuya cuenta había sido suspendida por proferir insultos antisemitas.
En España, el periodista de ultraderecha Javier Negre está tratando de recuperar el control de las cuentas de su panfleto Estado de Alarma, cerradas hace dos meses por propagar bulos. También se cerró la cuenta del opinador de extrema derecha Alvise Pérez, «por amenazar con hackear o revelar la información personal de otra persona».
Musk se ha comprometido a que cualquiera cuya cuenta haya sido suspendido «por razones menores o dudosas será puesto en libertad desde la cárcel de Twitter». También pretende limpiar la red social de cuentas falsas que se utilizan para realizar ataques coordinados.
6. Elige tu propia aventura
Otro de los cambios propuestos por algunos usuarios y que Musk ha apoyado es el poder configurar el grado de moderación de Twitter. Que haya una modalidad para cuentas anónimas, avatares, donde no habría ninguna moderación. Una modalidad intermedia para gente que le va la jarana y que no le importa enfrentarse a insultos o contenidos ofensivos. Y un Twitter más parecido al que hay hoy, con un nivel de moderación alto.
También ha sugerido Musk que podría adoptarse un sistema de calificación de tuits, para que se vayan definiendo que tipo de contenidos no quiere ver el usuario. Se decantaría una calificación similar a la que tienen las películas en relación a las edades recomendadas para verlas.
7. Una empresa más ligera y menos protocolaria
Elon Musk se ha quejado en ocasiones de que en Twitter había demasiada gente con funciones poco definidas, o duplicadas, o inservibles. De acuerdo con diversas filtraciones, el magnate se propone recortar hasta el 75% de la plantilla.
El nuevo primer ejecutivo quiere aligerar la estructura de la compañía, centrarla mucho en los servicios para el usuario y limitar al máximo todos los protocolos y exigencias de cumplimiento que complican la utilización de la herramienta.
Fuente: Cincodias.elpais.com